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LA IGLESIA DE SAN IGNACIO DE GROS CAPRICHO NEOGÓTICO
La iglesia de San Ignacio de Gros, alza su torre neogótica en el corazón del elegante barrio donostiarra que surgió a caballo entre los siglos XIX y XX.
Su interior, se encuentra decorado con obras de arte desconocidas incluso para muchos donostiarras, como el Cristo Redentor del escultor Mariano Benlliure, una de las pocas obras del artista en Gipuzkoa.
HISTORIA DE LA PARROQUIA DE SAN IGNACIO DE GROS
La construcción de este templo, comenzó en 1888 a cargo de José Goicoa Barcaiztegui, arquitecto municipal encargado también de urbanizar los arenales adquiridos por José Gros y transformarlos en una «pequeña París».
Los hijos de José Gros, impulsaron la construcción del nuevo templo neogótico, tan al gusto de la época. Los terrenos fueron cedidos por Agueda Gros y la piedra para su construcción corrió a cargo de Tomás Gros, promotor del nuevo barrio tras la muerte de su padre.
La nueva iglesia donostiarra, nacía al amparo de poderosos padrinos y madrinas, siendo la primera piedra colocada por la reina María Cristina.
¿Sabías que la iglesia de San Ignacio no se pudo orientar litúrgicamente? Es decir, con dirección oeste-este. Y es que la nueva iglesia se tuvo que adaptar al trazado del nuevo barrio estando su cabecera orientada hacia el norte.
El templo fue inaugurado por todo lo alto el 24 de julio de 1897, siendo bendecido por el obispo Piérola y contando con la presencia de la familia real y todo su séquito, que por aquel entonces acostumbraban a veranear en la ciudad.
La multitud se congregó entre el palacio de Miramar y el barrio de Gros, con la intención de ver pasar la comitiva real, convirtiéndose aquel día en una celebración para los habitantes de la ciudad, que veían como iba cambiando la fisionomía de la antigua plaza fuerte amurallada y tomaba camino de convertirse en una moderna ciudad.
Sin embargo, el templo no adquirió su actual imagen hasta 1928, cuando la torre fue completada gracias a las aportaciones del duque de Mandas, quien no pudo verla terminada, ya que murió diez años antes.
El entorno de la iglesia cambió radicalmente con la construcción de la actual Plaza de Cataluña y el traslado de las escuelas Viteri.
Actualmente, aquí se encuentra un gran parque infantil, conviviendo los pinos de sombra con los cerezos japoneses, siendo lugar de reunión de familias y vecinos de la zona.
¿Sabías qué como agradecimiento por bautizar a la plaza con el nombre de Cataluña, el Círculo Catalán consiguió traer la Virgen de la Moreneta desde Montserrat? ¿Y que la Moreneta fue entronizada en la iglesia de San Ignacio?
ARQUITECTURA DE LA IGLESIA DE SAN IGNACIO.
La iglesia de San Ignacio de Gros, está formada por tres naves longitudinales de cinco tramos cada una, estando su cabecera rematada por un ábside heptagonal. La anchura de la nave central es de 10 metros, mientras que las laterales miden la mitad.
En el Altar Mayor, podremos admirar su sillería de nogal y los mosaicos de la pared, donde se reflejan cinco momentos claves de la vida y obra de San Ignacio de Loyola, obra de la Casa Maumejean, como el resto de mosaicos y vidrieras del templo.
Mientras que en el coro, destaca un órgano de 1914 de la casa alemana Walcker.
LOS PANTEONES
En el interior de la iglesia de San Ignacio, podremos admirar varías obras de arte funerario.
En el lado de la Epístola, se encuentra la capilla-panteón de la condesa del Olmo, obra de Juan Martorell y Montells, arquitecto historicista que fue profesor de Antonio Gaudí.
Mientras que en el lado del Evangelio se encuentra el magnífico panteón neorrenacentista del duque de Mandas, uno de los mayores benefactores del templo.
El duque de Mandas, falleció en Madrid el 17 de diciembre de 1918, siendo trasladado su cuerpo en tren hasta su querida ciudad natal, desde donde sería llevado a su villa de Cristina Enea para ser velado.

Su funeral se celebró en la iglesia de San Ignacio siendo oficiado por el obispo.
El féretro fue sacado a hombros y escoltado por los miqueletes, mientras que al frente del cortejo iban los niños de los asilos de la ciudad portando antorchas, siendo finalmente llevado al panteón familiar de Polloe.
El duque donó su fortuna a la diputación de Gipuzkoa, con la condición de que fuese dedicada a la instrucción de las clases obreras.
Mientras que al ayuntamiento de Donostia-San Sebastián legó su villa Cristina Enea (actualmente uno de los parques más importantes de la ciudad) y su biblioteca con más de 18.000 libros.
Destaca en su mausoleo el ángel en actitud expectante que apoya su cabeza en una trompeta, obra del artista Isidoro Uribesalgo. ¿Tal vez se trate del arcángel Gabriel con su trompeta para anunciar el regreso del Señor a la tierra?
ALTAR DEL SAGRADO CORAZÓN
Otro de los tesoros que guarda la parroquia de San Ignacio, es el altar del Sagrado Corazón, obra de Mariano Benlliure, uno de los mejores escultores españoles.
La obra fue encargada por la duquesa de Mandas, Cristina Brunetti, quien no la pudo ver acabada, ya que falleció el 13 de agosto de 1914.
La obra fue realizada entre 1914 y 1915, y se cuenta, que cuando el escultor visitaba la ciudad, pasaba largos ratos frente a ella.
En el conjunto escultórico, destaca el sagrario de bronce, donde se representa la Sagrada Familia, y los candelabros, obra también de Benlliure, que se encuentran en el cuerpo de mármol que sirve a su vez de pedestal para la estatua del Cristo Redentor.
El Cristo de Benlliure, fue bellamente trabajado a partir de mármol de Seravezza, pudiendo leerse su firma en la base de la obra de arte, con la fecha de 1914.
INFORMACIÓN UTIL SOBRE LA PARROQUIA DE SAN IGNACIO
HORARIO:
De lunes a viernes: 10:00 a 13:00 y de 17:00 a 20:00
De sábado a domingo: 9.30 a 14.00
DIRECCIÓN: Zabaleta Kalea, 18, 20002 Donostia
CONTACTO:
info@parroquiasanignacio.org