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LATASA (EN EL VALLE DE IMOTZ) GUARDIÁN DE ANTIGUOS CAMINOS
En el valle de Imotz, muy cerca de Iruña/Pamplona se encuentra la pequeña localidad de Latasa, unida desde su fundación a los caminos que conectaban Gipuzkoa con Navarra, fruto de los cuales aún quedan varios vestigios de diferentes épocas.
BREVE HISTORIA DE LATASA
La primera mención escrita data de 1280, cuando aparece escrito como «Latassa»
y englobada dentro del «Val de Ymoz». En 1360 vuelve a ser nombrada, esta vez como «Lataxa».
La importancia de Latasa durante la Edad Media, radica en que por aquí pasaba la Calzada Real que unía Iruña/Pamplona con Donostia-San Sebastián, un importante nudo de comunicación que fue creado por los reyes de Navarra para que el reino tuviese salida al mar a través de la villa de San Sebastián, fundada en 1180.
Cuando Gipuzkoa fue incorporada a Castilla en el 1200, la Calzada Real siguió haciendo de nexo entre los dos reinos, hasta que el reino de Navarra fue conquistado por Castilla en el siglo XVI.
Muchas de las casas de Latasa, llevan en su nombre el recuerdo de la Calzada Real, como Mandategia (Mandoa es buey en euskera, así que sería el lugar donde descansasen y abrevasen estos animales de carga), Arotzenea (que significa del herrero en euskera) o Ostazarrea (hostal viejo).
En 1793 se abrió el nuevo camino carreteril de la capital de Navarra a Tolosa y que provocó que la vetusta Calzada Real cayese en desuso. Esta carretera pasaba muy cerca de Latasa, abriéndose dos Ventas para los viajeros junto a ella.
EL PLAZAOLA
El siglo XX trajo la llegada del ferrocarril a Latasa, ya que durante 40 años el tren del Plazaola conectó Iruña/Pamplona con Donostia-San Sebastián. Aunque el tren terminó su andadura a mediados del siglo XX, aún quedan algunos vestigios del Plazaola en Latasa como el puente por el que el Plazaola cruzaba el río Larraun.
Actualmente, gran parte del antiguo trazado ha sido recuperado convirtiéndose en la Vía Verde del Plazaola, siendo disfrutada por multitud de ciclistas y peatones.
En Latasa, sigue en pie el antiguo edificio de la estación, que es utilizado actualmente como vivienda particular. Este edificio tenía despachos y ventanilla para comprar los billetes, así como mostrador para equipajes. En la planta alta vivía el jefe de la estación.
También existía un almacén para mercancías que ha sido recuperado por una cooperativa para ofrecer comidas y alquiler de bicicletas: Biltegia.
En Latasa podremos admirar grandes casas del siglo XVIII con cubierta a 2 y 4 aguas. Una de ellas, Juanesena, que cuenta con un antiguo escudo en su fachada, se encuentra marcada por multitud de balazos. Desconozco de cuando son esas marcas, aunque el 25 de junio de 1873 se produjo un sangriento enfrentamiento entre carlistas y liberales en el cercano pueblo de Udabe.
Una guarnición liberal se encontraba en las cercanas Ventas de Urritza para asegurar la retirada a Pamplona, que seguramente se realizó por Latasa e Irurtzun. Aunque por ahora son solo hipótesis del autor.
Iglesia de San Esteban
Dominando el caserío, se encuentra la iglesia de San Esteban, de origen gótico aunque reconstruida en el siglo XVIII.
Su torre de origen medieval guarda una campana fundida en 1481.
Su portada de arco apuntado se encuentra decorada con figuras geométricas y protegida por un pórtico.
En su interior, se guarda un retablo mayor de estilo romanista construido en el siglo XVI.
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