LA CUARTA DINASTÍA DE EGIPTO.
LA DINASTÍA DE LOS CONSTRUCTORES DE LAS PIRÁMIDES MÁS FAMOSAS.
IV DINASTÍA 2575-2465 a.C.
El Imperio Antiguo de Egipto, se compone de las III, IV, V y VI dinastías faraónicas. Como ya hemos visto, la III dinastía, conocida como dinastía menfita por ser la que se estableció en la ciudad de Menfis, fue un periodo de transición en el que destacó por sus logros el faraón Djoser.
En las siguientes dinastías, los progresos adquiridos por sus antecesores fueron afianzados, iniciándose un largo periodo de paz y progreso.
Entre los logros económicos, se continuó con el comercio y la explotación minera en zonas como el Sinaí y Nubia, extendiéndose el área de influencia egipcia a Siria.
Aunque el primer faraón de la IV dinastía, Seneferu (también conocido como Esnefru, Snefru, Snefurut o Snofru), no sea muy conocido, lo cierto es que mantuvo campañas contra los Nubios y Libios para mantener a salvo las fronteras del país, y construyó varias pirámides en Dashur, aunque no son tan conocidas como los de sus sucesores.

El hijo de Senefuru, Jufu, ha pasado a la posteridad por su nombre helenizado, Keops, y como el que mandó construir la Gran Pirámide de Guiza. De los siguientes faraones de la IV dinastía, hay que destacar a Jafra, conocido por su nombre griego Kefrén, y su hijo Menkaura o Micerino, los destinatarios de las otras dos famosas pirámides de la necrópolis de Guiza.

Aunque no se sabe como finalizó la IV dinastía, se cree que el último de los faraones fue Dyedefptah.
Resumiendo, la construcción de las grandes pirámides de Guiza, nos hace pensar que la IV dinastía fue un periodo próspero y con un sofisticado nivel de organización.