TRAS LAS HUELLAS DEL PASADO NAZI DE BERLÍN
Aunque a principio del siglo XX, Berlín era una ciudad mayoritariamente de izquierdas y bastión del KPD, el Partido Comunista de Alemania, con la llegada al poder del Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán bajo el mando de Adolf Hitler, la ciudad se convirtió en la capital del régimen nazi en Alemania.
En realidad, Hitler y los principales mandatarios nazis detestaban Berlín, ya que la consideraban una ciudad decadente. Para conquistar el poder en la capital alemana, los nazis necesitaban una excusa para deshacerse de la oposición comunista y socialdemócrata. Esto fue posible gracias al incendio del Reichstag el 27 de febrero de 1933. Los nazis, acusaron públicamente a los comunistas de ser los responsables del incendio, dando comienzo a la represión política. Se calcula que para finales del año 1933, casi 30.000 personas permanecían encarceladas por motivos políticos, una antesala de la eliminación sistemática de opositores, judíos, gitanos y homosexuales que se produciría unos pocos años después.
En Berlín, se empezaron a construir los edificios que debían servir al entramado nazi y al propio canciller Adolf Hitler, como la Nueva Cancillería del Reich. El encargado de diseñar la mayoría de estos edificios sería Albert Speer, el que era el arquitecto predilecto del führer.
Después llegaron los terribles acontecimientos que todos conocemos, como la Segunda Guerra Mundial, y la Batalla de Berlín, que redujeron a la que estaba destinada a convertirse en Germania, la megalómana capital que debía construirse en caso de ganar los nazis la guerra, en un inmenso páramo de escombros.
Hoy en día, no son muchos los restos de aquella Berlín nacionalsocialista, ya que lo que no fue destruido por los bombardeos aliados o los combates callejeros contra los soviéticos, fue arrasado después de la contienda con el fin de eliminar el recuerdo de aquellos fatídicos años.
La calle Wilhelmstraße, fue el centro del poder gubernamental alemán desde 1871 hasta la caída del Tercer Reich en 1945. Aquí fue donde se construyeron y se encontraban la mayoría de oficinas de los principales mandatarios nazis.
- 1. Oficina de Rudolf Hess
Este edificio construido en 1899 para el banquero Gerson von Bleichröder, se convirtió en 1934 en la oficina desde la que Rudolf Hess, jefe del Partido Nazi, se encargaba de que todas las leyes y decretos estuviesen en concordancia con la ideología nazi. Cuando Rudolf Hess, voló a Inglaterra en mayo de 1941 para supuestamente iniciar conversaciones de paz con el gobierno británico, fue sustituido por Martin Bormann, que se encargaría desde entonces de controlar el Partido Nacional Socialista Obrero Alemán desde estas oficinas. Después de 1945, el edificio fue restaurado y usado por el gobierno comunista del este. Desde la reunificación alemana, aquí se encuentra la sede del Ministerio de Agricultura.
Dirección: Wilhelmstraße 54
- 2. Nueva Cancillería del Reich
En 1938, Hitler ordenó a su arquitecto preferido, Albert Speer, construir un enorme palacio que debía integrar entre otras estancias, el búnker del Führer, el despacho personal de 400 m² de Hitler y un cuartel pasa la guardia personal de este, la Primera División de las temidas Waffen-SS.
El mastodóntico edificio, fue seriamente dañado por los bombardeos aliados y el ataque final del ejército soviético. Después de la caída de Berlín, los mandatarios soviéticos ordenaron demoler el edificio para borrar cualquier rastro de Adolf Hitler en la ciudad, no sin antes aprovechar algunos materiales. Por ejemplo, los bloques de granito de la cancillería y el mármol rojo que adornaba el despacho de Hitler fueron reutilizados para construir los memoriales de guerra soviéticos de la ciudad y para decorar la estación de metro de Mohrenstraße.
Dirección: Actualmente, la desaparecida Nueva Cancillería del Reich, estaría entre los números 1 y 20 de la calle Voßstraße.
- 3. Ministerio de Propaganda
El Ministerio de Propaganda se creó en 1933, quedando bajo la dirección de Joseph Goebbels (Paul Joseph Goebbels fue uno de los colaboradores más cercanos de Adolf Hitler). Desde este edificio, se vigilaban a los diferentes medios y artistas (prensa, literatura, arte, radio, cine, etc…) para que siguiesen las directrices que desde aquí se dictaban.
Convencido antisemita, Goebbels utilizó el poder total que tenía sobre los medios para azuzar el odio contra los judíos y otras minorías. Era tal la fidelidad que tenía Goebbels hacía Hitler, que este se suicidó junto a su mujer después de envenenar a sus seis hijos en el Führerbunker un día después del suicidio del dictador. Hoy en día, el edificio aloja el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
Dirección: y Mauerstraße 45-53
- 4. Bunker del Führer o Führerbunker
En 1936, se construyó un búnker antiaéreo que podía albergar a más de cien personas bajo los jardines de la Vieja Cancillería. Al construirse la Nueva Cancillería del Reich, se construyó el nuevo refugio destinado a Hitler y los altos mandos nazis. El refugio se encontraba a 8 metros de profundidad y contaba con paredes de 4 metros de grosor.
Debido a los intensos bombardeos aliados sobre Berlín y la cercanía del Ejército Rojo, Hitler se trasladó al búnker el 16 de enero de 1945. Ante la inminente caída de Berlín a manos del ejército soviético, Hitler se acabó suicidando junto a Eva Braun el 30 de abril de 1945. Después de la guerra, los restos del Führerbunker fueron demolidos por orden de las autoridades de Alemania Oriental.
Hoy en día, sobre los restos del búnker se encuentra un aparcamiento, y solamente un panel informativo recuerda que aquí se produjo uno de los hechos más trascendentales del siglo XX.
Dirección: Voßstraße 4-6
- 5. Memorial Johann Georg Elser
En la calle Wilhelmstraße, se encuentra la escultura de acero de 17 metros que representa a Johann Georg Elser, un carpintero comunista que intentó asesinar a Hitler.
El 8 de noviembre de 1939, Hitler, Goebbels y otros mandatarios nazis, se reunieron en una cervecería de Múnich, sin sospechar que Georg Elser había colocado una bomba en su lugar de reunión. La bomba explotó algunos minutos más tarde de que Hitler abandonase el local, matando a 8 personas. Georg Elser fue detenido y enviado al campo de concentración de Dachau, donde pasó 5 años antes de ser ejecutado el 9 de abril de 1945.
Dirección: Wilhelmstraße 49
- 6. Ministerio de Aviación (Reichsluftfahrtministerium)
Entre los años 1935 y 1936 se construyó en el centro de Berlín un monumental edificio de 56.000 m² que contaba con 2.000 oficinas para albergar el ministerio de Aviación del Reich. Desde aquí, Hermann Göring, controlaba la Luftwaffe.
Durante los bombardeos aliados, el edificio apenas recibió el impacto de alguna bomba, sobreviviendo intacto a la Segunda Guerra Mundial. Al finalizar la contienda, el edificio albergó varios ministerios de la RDA, albergando actualmente el Ministerio de Finanzas.
Dirección: Wilhelmstraße 97
- 7. Monumento a los homosexuales perseguidos por el nazismo
Desde el año 2008, un bloque de hormigón en el parque Tiergarten, recuerda a los homosexuales que fueron represaliados durante la dictadura nazi. En el interior del bloque de hormigón, hay una pantalla en la que aparece un vídeo con dos hombres besándose, y junto al monumento, una placa explica la represión sufrida por este colectivo durante el Tercer Reich.
Hasta la toma de poder por parte de los nacionalsocialistas, Berlín era una de las ciudades europeas más abiertas, contando con multitud de pubs y cabarets para el público gay. Todo esto cambió, cuando la Gestapo creó un departamento especial para perseguir la homosexualidad. Se calcula que alrededor de 10.000 homosexuales fueron encarcelados en campos de concentración, muriendo aproximadamente la mitad de ellos.
Dirección: Ebertstraße
- 8. Monumento a la Quema de Libros
El 10 de mayo de 1933, un grupo de estudiantes pertenecientes a la Asociación de Estudiantes Nacionalsocialistas, acompañados de profesores de la Universidad Friedrich Wilhelm (actualmente Universidad de Humboldt), procedieron a la quema de 20.000 libros pertenecientes a escritores judíos, comunistas y críticos con el régimen nazi en la que hoy se conoce como Bebelplatz (por aquel entonces Kaiser Franz Josef Platz).
Este simbólico acto, sería el preludio de la persecución de escritores e intelectuales molestos para el régimen. El memorial consta de una placa de vidrio desde la que se ve la sala subterránea de 5 m³ con estantes vacíos con capacidad para 20.000 volúmenes. El monumento es obra del artista Micha Ullman y fue inaugurado en 1995.
En el suelo también hay una placa de bronce con la siguiente inscripción del escritor Heinrich Heine: «Das war ein Vorspiel nur, dort wo man Bücher verbrennt, verbrennt man am Ende auch Menschen.» (Eso sólo fue un preludio, ahí en donde se queman libros, se terminan quemando también personas).
Dirección: Bebelplatz
9. Las águilas nazis
Durante el Tercer Reich, se adoptó al águila como símbolo nacional (el águila alemana, está considerado como el emblema más antiguo de Europa, siendo las tribus germanas las primeras en utilizarlo). El águila se solía representar con las alas extendidas y posada sobre una corona de hojas de roble que rodeaba una esvástica. Cuando finalizó la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de águilas fueron destruidas, aunque otras se conservaron retirándoles solamente la esvástica. En Berlín, aún se pueden ver algunas de estos emblemas nazis originales. El más espectacular de todas, se encuentra sobre el edificio que alberga la Oficina Estatal de Empleo Berlín-Brandeburgo.
Este edificio fue construido en 1938 por el arquitecto Hans Frizsche, y se encontraba rematado por un gran águila imperial, que aún hoy se conserva. Este vestigio del Tercer Reich se encuentra a 200 m del Checkpoint Charlie, por lo que es muy fácil de encontrar.
Dirección: Friedrichstraße 34
- 10. Monumento a las víctimas gitanas del holocausto
Al sur de Reichstag, en una esquina del Tiergarten, se encuentra este monumento dedicado a los entre 220.000 y 500.000 sinti y romaníes asesinados en el Porajmos o Porraimos, el genocidio del pueblo gitano planeado por los nazis. El monumento fue diseñado por el escultor israelí Dani Karavan y fue inaugurado en 2012. Se trata de un estanque circular en cuyo centro se encuentra una piedra triangular, en referencia a los símbolos que debían llevar los prisioneros en los campos de concentración.
Junto al estanque, sobre una losa de granito, se encuentra escrito con letras de bronce el poema «Auschwitz» del poeta y músico italiano Santino Spinelli.
“Rostros hundidos / ojos extinguidos / labios fríos / silencio /un corazón destrozado /sin respiración / sin palabras / sin lágrimas”
Dirección: Simsonweg, 10117
- 11. Embajada de Suiza
Durante el Tercer Reich, los nazis iniciaron una política de saqueo de sus víctimas para financiar la maquinaria bélica. El oro saqueado (incluso el obtenido de las dentaduras de los asesinados en las cámaras de gas), fue transferido a diferentes bancos extranjeros, principalmente suizos, consiguiendo así divisas para continuar la guerra. Durante la guerra, el Banco Nacional Suizo, recibió 440 millones de dolares de oro procedente de los nazis, estimándose que 316 millones fueron fruto del saqueo. La embajada de Suiza (como es bien sabido, país neutral durante la Segunda Guerra Mundial), fue clave en todo este entramado.
El edificio que albergaba la embajada Suiza, sobrevivió a los bombardeos aliados, y fue utilizada como centro de mando de las tropas soviéticas durante el asalto al Reichstag. Hoy en día, el edificio sigue albergando la embajada Suiza, país que desde 1955 sigue buscando a los propietarios de las riquezas saqueadas.
Dirección: Otto-von-Bismarck-Allee 4A
- 11. Topografía del Terror (topographie des Terrors)
Con más de un millón de visitantes al año, este museo y centro de documentación sobre la persecución organizada por el régimen nacionalsocialista, se ha convertido en una de las visitas imprescindibles de la ciudad.
El museo se levanta sobre los terrenos donde se encontraba la Oficina Central del Reichsführer (cargo que ostentaba Heinrich Himmler como líder de las SS), la sede de la Oficina Central de Seguridad del Reich (SD), y la Central de la Gestapo. Es decir, que desde aquí se organizó la persecución y exterminio de los judíos, así como de los opositores políticos.
Estos edificios fueron gravemente dañados durante los bombarderos aliados y sus ruinas demolidas al finalizar la contienda. Más tarde, aquí se estableció la división entre las zonas americanas y soviéticas, pasando por aquí el Muro de Berlín. Todavía se puede contemplar gran parte del muro, siendo uno de los tramos más largos de los que subsisten en la ciudad.
Dirección: Niederkirchnerstraße 8
- 12. Monumento a los judíos de Europa asesinados (Monumento del holocausto)
En el centro de Berlín, entre la Puerta de Brandeburgo y Potsdamer Platz, se encuentra el impactante Monumento del holocausto. Diseñado por el arquitecto estadounidense de origen judío Peter Eisenman e inaugurado el 10 de Mayo de 2005, este monumento de 19.000 m² que contiene 2711 estelas, se construyó con el objetivo de recordar a los millones de judíos asesinados durante el Holocausto.
El memorial también cuenta con un centro de información subterráneo, donde se documenta el exterminio y persecución de los judíos en Europa.
Dirección: Cora-Berliner-Straße 1
- 12. Casa de los Pilotos (Haus der Fliege)
Muy cerca de la exposición «Topografía del Terror«, se encuentra un majestuoso edificio que fue construido entre 1892 y 1898 para albergar el parlamento Regional Prusiano, hasta que este fue disuelto en 1933.
Dos años después, Herman Göring, ordenó que el edificio fuese reformado para albergar la Casa de los Pilotos, asociación que dependía del Ministerio de Aviación. Actualmente, el edificio sirve de sede para la Cámara de diputados de Berlín.
Dirección: Niederkirchnerstraße 5
- 13. Stolpersteine
Tal vez, en nuestro recorrido por las calles de Berlín, nos tropecemos con unas placas doradas que sobresalen entre los adoquines de las aceras. Se trata de un proyecto creado por el artista Gunter Demnig, para recordar a las victimas de los nazis en Berlín. Delante de la última casa donde vivieron las personas que fueron deportadas a los campos de concentración, se ha colocado pequeños bloques de hormigón de 10 centímetros de longitud cubiertos con una placa de latón donde aparece escrito el nombre de las víctimas de la persecución nacionalsocialista y al lugar donde fueron enviados. En total, se han colocado casi 8.500 placas conmemorativas en las calles de la ciudad. Un pequeño homenaje que nos recordará al impactante Shadow Wall de Amsterdam.
UBICACIÓN
gracias los leere con atencion
Gracias a tí por leer el post! 🤗
WOW! muchas cosas que ver, el que más me llama la atención es el búnker. Nunca he entrado a ninguno. Gracias por la información, saludos
Muy interesante el contenido, gracias por compartirlo. Saludos
Gracias a tí por comentar.
Saludos.
Gracias por la información, como era el transporte público en berlin en aquellos años? tienes idea?
Estuve hace poquito en berlin, en julio , mucho calor, increible conocer un lugar que fue el epicentro del mundo y hasta hoy en dia es una potencia mundial.
Viajar es volar dicen.
X muchos viajes mas!
Saludos desde ecuador!
Anita